Etiquetado: Serra de Espadà

Un restaurante en la Naturaleza

La Serra del Espadà es último suspiro montañoso del Sistema Ibérico antes de llegar al mar. Separa las cuencas del Río Mijares y el Palancia, escondiendo multitud de lugares de interés: profundos barrancos donde perviven bosques de alcornoques centenarios, pueblos de casas encaladas y trazado medieval que recuerdan su pasado morisco, restos históricos como castros íberos o trincheras de la guerra civil…en definitiva, lugares maravillosos para disfrutar de naturaleza y el ambiente rural.

Uno de los últimos estímulos para visitar esta zona es el complejo Mar de Fulles. Bajo este sugerente nombre yace un proyecto de ecoturismo, formado por un hotel y un restaurante,  que persigue retos de autosuficiencia energética y búsqueda de la armonía con la naturaleza que lo rodea.

Sorprende la calidad y potencial del restaurante, a un nivel al que pocos de la provincia pueden llegar. La filosofía de trabajo reivindica el producto de proximidad y ecológico: las verduras son de su propia huerta, los pescados de las lonjas cercanas, el pan de cereales ecológicos y de masa madre; el AOVE, de variedad serrana, de almazaras de los pueblos de la sierra…

El resultado son platos vistosos, llenos de armonía y de sabor. Recetas sencillas pero con grandes dosis de imaginación y técnica. Trabajan únicamente con dos menús: estacional (4 platos) y degustación (7 platos) que rotan constantemente en función de las estaciones o la disponibilidad de algún producto, con lo que cada visita encierra nuevas sorpresas.

La interesante carta de vinos tiene también inclinación por vinos ecológicos y valencianos, pocos frecuentes y que permiten probar nuevos sabores.

El comedor, con la cocina a la vista,  es amplio y acogedor. Impera el diseño minimalista, en tonos blancos y neutros, y posee unas maravillosas vistas de las montañas colindantes a través de sus amplios ventanales.

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No se usan manteles, pero las mesas de madera maciza transmiten prestancia. La cubertería, la vajilla y una cuidada cristalería (marca stölzle) demuestran un cuidado máximo por los detalles, en la línea de trabajo buscada. El servicio es cercano y agradable.

 

Como complemento a la comida, vale la pena darse un tranquilo paseo por un camino marcado junto a Mar de Fulles. Es un sencillo recorrido de menos de media hora, que permite descubrir alcornoques centenarios y otras especies botánicas junto a un pintoresco barranco.

 

Ya sólo falta que os deis un homenaje y vayáis a disfrutar de este gran restaurante, situado en un enclave inmejorable. Seguro que disfrutáis.

¡Hasta pronto!